Comentario de la Tirada de la nariz, fragmento de Cyrano de Bergerac / Edmond Rostand.
[…] «EL VIZCONDE DE VALVERT (encogiéndose de hombros) ¡Es sólo un fanfarrón! DE GUICHE: ¿Nadie va a responderle? EL VIZCONDE: ¿Cómo que nadie? ¡Aguardad! He de soltarle una pulla que… (Avanza hacia Cyrano, que le observa, y plantándose delante de él con aire fatuo) Tenéis una nariz… una nariz… grandísima. CYRANO (en tono grave): ¡Mucho! EL VIZCONDE (riendo): ¡Ja! CYRANO (imperturbable): ¿Y qué más? EL VIZCONDE: Yo… CYRANO: ¡Ah, no, sois algo corto, jovenzuelo! Pueden decirse… ¡Dios mío!… tantas cosas más… Variando el tono ― por ejemplo, atended: Agresivo: “¡Yo, caballero, si tal nariz tuviera os juro que al instante me la amputaría!” Amistoso: “¡Se os debe de meter en vuestra taza; para beber, tendréis que fabricaros una copa especial!” Descriptivo: “¡Es una roca!… ¡Un pico!… ¡Un cabo! ¡Qué digo un cabo!… ¿Es toda una península!” De escribanía: “¿Caballero, o caja de tijeras sois?” Curioso: “¿De qué os sirve esa oblonga cápsula?” Gracioso: “¿Tanto amáis a los pájaros que paternalmente