Fragmento de la
escena XII de Luces de Bohemia, de
Ramón del Valle-Inclán.
MAX: ¿Debe estar amaneciendo?
DON LATINO: Así es.
MAX: ¡Y qué frío!
DON LATINO: Vamos a dar unos pasos.
MAX: Ayúdame, que no puedo levantarme. ¡Estoy aterido!
DON LATINO: ¡Mira que haber empeñado la capa!
MAX: Préstame tu carrik[1],
Latino.
DON LATINO: ¡Max, eres fantástico! MAX: Ayúdame a ponerme en pie.
DON LATINO: ¡Arriba, carcunda[2]!
MAX: ¡No me tengo!
DON LATINO: ¡Qué tuno eres!
MAX: ¡Idiota!
DON LATINO: ¡La verdad es que tienes una fisonomía algo rara!
MAX: ¡Don Latino de Hispalis, grotesco personaje, te inmortalizaré en una
novela!
DON LATINO: Una tragedia, Max.
MAX: La tragedia nuestra no es tragedia.
DON LATINO: ¡Pues algo será!
MAX: El Esperpento.
DON LATINO: No tuerzas la boca, Max.
MAX: ¡Me estoy helando!
DON LATINO: Levántate. Vamos a caminar.
MAX: No puedo.
DON LATINO: Deja esa farsa. Vamos a caminar.
MAX: Échame el aliento. ¿Adónde te has ído, Latino?
DON LATINO: Estoy a tu lado.
[…]
MAX: Los ultraístas[3]
son unos farsantes. El esperpentismo lo ha inventado Goya. Los héroes clásicos
han ido a pasearse en el callejón del Gato.
DON LATINO: ¡Estás completamente curda!
MAX: Los héroes clásicos reflejados en los espejos cóncavos dan el
Esperpento. El sentido trágico de la vida española sólo puede darse con una
estética sistemáticamente deformada.
DON LATINO: ¡Miau! ¡Te estás contagiando!
MAX: España es una deformación grotesca de la civilización europea.
DON LATINO: ¡Pudiera! Yo me inhibo.
MAX: Las imágenes más bellas en un espejo cóncavo son absurdas.
DON LATINO: Conforme. Pero a mí me divierte mirarme en los espejos de la
calle del Gato[4].
MAX: Y a mí. La deformación deja de serlo cuando está sujeta a una
matemática perfecta. Mi estética actual es transformar con matemática de espejo
cóncavo las normas clásicas.
DON LATINO: ¿Y dónde está el espejo?
MAX: En el fondo del vaso.
DON LATINO: ¡Eres genial! ¡Me quito el cráneo!
MAX: Latino, deformemos la expresión en el mismo espejo que nos deforma las
caras y toda la vida miserable de España.
DON LATINO: Nos mudaremos al callejón del Gato.
Esquema de
organización de ideas.
1. Descripción espacio-temporal:
-Tiempo externo:
-A punto de
amanecer.
-Hace frío.
-Espacio: los dos
personajes se encuentran en una calle: Max sentado en el suelo.
2. Personajes: los dos llevan una vida miserable.
-MAX: borracho, ciego,
aterido de frío, con mala cara (moribundo).
-DON LATINO: borracho,
egoísta e inconsciente del peligro que corre su compañero.
3. Definición de EL ESPERPENTO, como género literario:
-Origen: Goya.
-Técnica:
-Deformar los personajes hasta hallar su verdadera
naturaleza, que es semejante a la imagen que devolvería un espejo cóncavo si en
él se miraran esos personajes.
(Ellos
mismos son un ejemplo: su vida no es trágica, sino una farsa).
-España es una
imagen deformada, grotesca de la civilización europea.
-El lenguaje
utilizado también ha de sufrir una deformación para lograr el esperpento.
RESUMEN.
Don Latino y Max Estrella se encuentran a punto de amanecer en una calle de
Madrid. Hace frío. Max, sentado en el quicio de una puerta, muerto de frío, con
mala cara y ebrio, es incapaz de incorporarse cuando su acompañante le anima a
caminar. En esta tesitura, Max desarrolla la teoría que llama Esperpento. Con
esta técnica intenta descubrir cuál es la verdadera naturaleza de los
personajes (la naturaleza de ellos mismos, que no es trágica, como dice don
Latino, sino más bien una farsa) y de nuestro país. La verdadera imagen de
España es grotesca si la comparamos con la civilización europea, como lo es la
imagen de cualquier modelo reflejada en un espejo cóncavo. Y para describir la
imagen y desarrollar el esperpento también es necesario deformar el propio
lenguaje.
TEMA.
El principal tema es la formulación de lo que es el esperpento como género
literario por parte de Max. Desde el punto de vista del desarrollo argumental,
podemos señalar como tema la agonía del protagonista sin que don Latino se
percate de la peligrosa situación de su compañero.
estructura externa.
Es un fragmento en prosa de la escena XII de la obra de Luces de Bohemia de Ramón del Valle
Inclán. Se trata de un diálogo teatral en el que cada parlamento está
encabezado por el nombre del personaje que habla.
estructura interna.
El texto lo podemos dividir en dos partes:
Desde la línea 1 a la 25, parte en la que se desarrolla la postración
agónica por la que está pasando Max sin que don Latino sea consciente del
peligro que corre su compañero.
Y desde la línea 25 a la 43; en esta parte se desarrolla la teoría del
esperpento, técnica que consiste en deformar los personajes y la realidad para
llegar al alma o a la esencia de ellos.
actitud.
La actitud del autor de una obra literaria es subjetiva. Crea un universo
ficticio en el que controla todos los elementos: la trama del argumento, el
perfil de los personajes, el tema que se desarrolla… Ahora bien, esta actitud
es diferente en cada una de las dos partes de este fragmento. La primera la
podemos considerar más objetiva, pues el autor representa y hace avanzar la
acción con bastante objetividad y realismo. La escena es verosímil y
consecuente con los acontecimientos anteriores; además, no hay un lenguaje
excesivamente literario. En cambio en la segunda podemos afirmar que la actitud
es más subjetiva, pues aunque habla Max, lo que dice sobre el esperpento, son
palabras puestas en su boca por el autor sobre la técnica literaria llamada Esperpento.
En esta parte tampoco abundan los recursos literarios, pero encontramos alguna
metáfora, como, por ejemplo, en la línea 26/27: Los héroes clásicos han ido a pasearse…; en la línea 40: Me quito el cráneo… El empleo de estos
recursos es propio de una actitud subjetiva en la elaboración del discurso.
Podemos añadir que esa técnica deformante de la realidad y de los personajes, no deja de ser también un enfoque subjetivo
de lo que es la literatura.
intención del autor
Podemos resaltar, enlazando con lo anterior, que la intención principal del
autor es dar a conocer esta técnica literaria a través de la propia obra, que
se convierte en un ejemplo de la técnica empleada: los dos personajes son
esperpénticos. Otro objetivo, aparte del
literario, que podríamos añadir también es la de crear una obra de arte. Y, por
último, Valle muestra en esta obra una
característica noventayochista reflejada en la preocupación por la realidad
social y política problemática del país en esos primeros veinte años del siglo
XX.
TIPO DE TEXTO.
En cuanto al ámbito de uso el
texto pertenece al ámbito profesional: se trata de un texto de creación literaria. El fragmento es un diálogo de una obra
teatral, por tanto pertenece al género dramático. Los rasgos que lo identifican
como tal son los siguientes:
-
La acción avanza a través de lo que hacen y dicen los personajes
que están en escena.
-
Aunque en el fragmento no se han incluido acotaciones,
anotamos que éstas cumplen las siguientes funciones: indicar qué personajes hay
en escena, sus entradas, salidas… En Luces
de bohemia, además contribuyen al desarrollo de la acción con descripciones
ambientales que son más propias de la novela. Si a esto sumamos el carácter estético
de su estilo, concluiremos que sobrepasan el papel que las acotaciones tienen en
una obra dramática.
-
Los diálogos reproducen la conversación con las
variaciones tonales que corresponden al asunto que se represente: órdenes, exclamaciones,
preguntas...
En cuanto al género al que
pertenece el fragmento hay que anotar que con la obra se inicia un subgénero no
solo dramático, sino que aparece en otros géneros literarios, que es el
Esperpento, cuya técnica consiste en deformar a los personajes y la realidad
para descubrir su verdadera naturaleza. Desde el punto de vista clásico de
división de géneros dramáticos, don Latino habla de que su vida es una
tragedia. En el habla común se puede considerar así realmente la vida de
sufrimiento y privaciones de los personajes de la obra. También el papel del
destino es importante en la obra: desde el principio se plantea la muerte como
solución a sus desgraciadas vidas. Pero no cumple los otros requisitos del
género: la alcurnia de los personajes, el tema desarrollado no hace referencia
a pasiones transcendentales o incontroladas, el lenguaje no es el habitual en
estas obras… Max le replica a don Latino que sus vidas son más bien una farsa;
es decir, si tenemos en cuenta el carácter cómico y satírico de estas obras
breves de teatro, lo que se hace es criticar sus comportamientos y su vida en
general. Desde el punto de vista de división clásica podríamos considerar a Luces de bohemia un drama, por ser una
síntesis de farsa, comedia y tragedia.
El tipo de discurso
en cuanto al modo de elocución es un diálogo teatral escrito; se trata del libreto de
la obra. Ya se ha comentado anteriormente las características del diálogo teatral:
cada uno de los parlamentos está precedido del nombre del personaje que
interviene: MAX: ¿Debe estar amaneciendo?
Las características lingüísticas propias de este tipo de discurso son el uso de
verbos en tiempos presentes (L. 2: Así es.)
y formas exhortativas (L. 4: Vamos a dar
unos pasos.), la variedad de tonos y de enunciados v (Interrogativos: l.1 ¿Debe estar amaneciendo?; exclamativos,
L. 6: ¡Mira que haber empeñado la capa!)…
VALORACIÓN
PERSONAL.
La escena, uno de los momentos culminantes de la obra con gran
trascendencia para nuestro teatro contemporáneo, se sitúa después de que Max se
encuentra con la madre del niño muerto en los disturbios de la huelga de
proletarios y se entera, por un comentario del sereno, de la muerte del preso
anarquista catalán. Esta escena precede a la de la muerte de Max.
Desde el punto de vista humano, el lector siente una profunda pena por las
desgracias de los personajes, especialmente por la mala suerte de Max. A estas
alturas de la obra conocemos las condiciones duras en las que viven él y su
familia y las dificultades para ganarse la vida escribiendo a causa de su
ceguera; sabemos, además, que estas adversidades no son las únicas de su vida: habría que
añadir la poca consistencia de su comportamiento, pues en esta situación
económica desfavorable, su carácter altanero y su poco sentido común todavía
agrandan la desgracia al no saber aprovechar los pocos resquicios o asideros
que el destino le acaba de ofrecer(El dinero que le ha dado el ministro para
salir del paso y la pensión futura que recibirá a partir de ese momento). La
escena comentada es el colofón a sus desgracias: la muerte solitaria tirado a
la puerta de su casa abandonado y saqueado por don Latino. A pesar de la culpa
irremisible del protagonista, el lector casi le perdona, al igual que casi no
existen reproches por parte de su familia hacia él.
En cuanto al género del Esperpento que Valle-Inclán desarrolla, me parece
muy original. Original porque en su época y en el panorama teatral en el que
aparece (Teatro burgués, el teatro modernista…) supuso una innovación
arriesgada ya que fueron obras que no se pudieron representar en su día por las
dificultades de escenificación; sin embargo, me parecen muy efectivas para el
propósito del autor en ese momento de su vida: no hay manera mejor para
criticar la situación de España desde el punto de vista social y político,
también desde el punto de vista cultural, que fiscalizarla con la técnica del
Esperpento. Este proceder seguramente también se lo aplica Valle Inclán a la
etapa bohemia de su vida, por la cual la obra la podemos considerar también una
autocrítica.
Para finalizar es necesario resaltar la maestría del dramaturgo en el uso
de un lenguaje ágil, breve, ocurrente y magistralmente usado. El estilo
modernista se aplica aquí no solo para buscar la belleza, sino también al
servicio de la crítica social y política. Además, original es también la mezcla
de diversos registros lingüísticos: coloquialismos, jergas, hablas particulares…
mezclados con términos propios del registro culto.
ANÁLISIS
ESTILÍSTICO DE LOS ADJETIVOS.
Nos encontramos un texto en el que la presencia de adjetivos es notable,
sobre todo porque es un diálogo. Los mayoritarios son adjetivos calificativos
especificativos ya que seleccionan al sustantivo al que se refieren. Todos son
pospuestos al sustantivo. La aplicación de la cualidad al nombre es objetiva y
necesaria: los héroes clásicos (l.
26), sentido trágico (línea 29), vida española (l. 30), espejo cóncavo (líneas 34 y 37), estética
actual (l. 37),… En este primer grupo hay algunos adjetivos que están
modificados cuantitativamente, como por ejemplo: las imágenes más bellas (línea 34), o modalmente: estética sistemáticamente deformada (l.
30).
Sin embargo, encontramos otros dos grupos con los que se muestra
apreciaciones subjetivas por parte de uno de los personajes del diálogo, Max
Estrella. Se comentan primero los adjetivos calificativos explicativos. Dos los
podemos considerar epítetos, pues la cualidad expresada por el adjetivo está
contenida en la naturaleza semántica del nombre: deformación grotesca (l. 32), matemática
perfecta (l. 36). Al otro se le puede considerar valorativo, pues el
personaje emite un juicio: vida miserable
(l.42).
Donde se aprecia mayor carga subjetiva es en el uso de adjetivos con la
función de atributo en oraciones copulativas. Algunas de estas oraciones son
claramente valorativas, como, por ejemplo, en la línea 26: las imágenes… son… absurdas;
¡Eres genial!, de la línea 40.
Como conclusión, como ya se anticipó en el análisis de la actitud del
autor, siendo esta subjetiva por el tipo de texto, la subjetividad se aprecia
mucho más en la segunda parte de la estructura interna.
Funciones del
lenguaje presentes en el texto. Análisis de los recursos lingüísticos que justifican las
funciones del lenguaje que destacan en el texto y su relación con los elementos
de la comunicación.
Las principales funciones del lenguaje presentes en el texto son diferentes
según la parte que se analice. En la estructura interna se dividió el texto en
dos partes. De la línea 1 a la 25 y desde la línea 26 hasta el final. Esta
división queda reflejada en la diferencia de funciones del lenguaje usadas en
cada una de las dos partes. Así, en la primera centrada, desde el punto de
vista del contenido, en la postración agónica de Max sin que don Latino sea
consciente de ella, la función predominante es sobre todo la conativa, con la
que con don Latino intenta que su compañero se incorpore y deje de hacer lo que
él considera bromas. Veamos algunos ejemplos: en la línea 4 dice don Latino: Vamos a dar unos pasos; en la línea 9: Arriba, carcunda; en la 19: No tuerzas la boca más; en la 21: Levántate, vamos a caminar; en la 23: Deja
esa farsa, vamos a caminar… También encontramos en boca de Max una serie de
enunciados en los que predomina la función conativa con los que intenta que don
Latino sea consciente de la gravedad de su estado; por ejemplo, en la línea 5
dice Max: Ayúdame…; en la 7: Préstame tu carrik, Latino; en la 8: Ayúdame a ponerme de pie; en la 24: Échame el aliento… La función conativa
se puede rastrear en múltiples formas de exhortación, sobre todo imperativos,
pero también mediante adverbios: por ejemplo, en la línea 9, cuando dice don
Latino: Arriba, carcunda. También
perífrasis aspectuales incoativas, con un presente de indicativo utilizado por
imperativo en la línea 21: Vamos a
caminar. También un presente de
subjuntivo por ser la orden negativa en la línea 19: No tuerzas la boca, Max. Por otra parte, esta función del lenguaje se refuerza con la presencia de numerosos vocativos
o apóstrofes que, como formas apelativas, sirven para llamar la atención del
interlocutor: en la línea 7: Préstame tu
carrik, Latino; en la 8: Max,
eres fantástico; en la 9: Arriba, carcunda.
Aunque con menor presencia, también la función conativa está presente con
enunciados interrogativos con los que los interlocutores demandan una respuesta
o un cambio de actitud del otro; entre otros podemos citar en la línea 1 cuando
se dice: ¿Debe estar amaneciendo?; en
la 24: ¿Adónde te has ido, Latino?
Propia de la situación comunicativa que representa la escena, una
conversación de dos personas ebrias, y de los mensajes que se transmiten, es la
función expresiva, con las que se comunica la parte emotiva del hablante, representada
en el texto con también numerosos enunciados exclamativos. Resaltamos
los siguiente: en la línea 3: ¡Qué frío!;
en la línea de la 5: ¡Estoy aterido!;
en la 6: ¡Mira que haber empeñado la capa!;
en la 8: ¡Max, eres fantástico!; en
la 10: ¡No me tengo!; en la 20: ¡Me estoy helando!..
En la segunda parte, en la que Max desarrolla el concepto de Esperpento,
las funciones del lenguaje más representativas son la referencial o
representativa y la función expresiva. El desarrollo teórico del concepto se
realiza usando el lenguaje de manera objetiva para analizar lo que es el Esperpento.
Los enunciados dominantes son los enunciativos: verbi gratia, en la línea 26: El esperpentismo lo ha inventado Goya. Los
héroes clásicos han ido a pasearse en el Callejón del Gato; en la 29: Los héroes clásicos reflejados en los
espejos cóncavos dan el esperpento. El sentido trágico de la vida
española es una deformación grotesca de la civilización europea. En
estos enunciados se puede apreciar el uso del presente intemporal, propio del
discurso expositivo (Estos verbos están subrayados en las citas anteriores). No
obstante, podemos matizar la afirmación anterior diciendo que estas ideas sobre
el Esperpento suponen un enfoque personal del hecho literario, por lo que se
puede afirmar que también la función expresiva está presente. Además, alguno de
los enunciados de esta segunda parte es una muestra de esta función del
lenguaje: en la línea 26 se dice: Los ultraístas
son unos farsantes; en la 26: Los
héroes clásicos han ido a pasearse en el Callejón del Gato… La reacción de Don
Latino a las ideas expresadas por Max son también una muestra de esta función
expresiva, en la línea 28: ¡Estás
completamente curda!; en la 31:¡Miau!¡Te
estás contagiando!.., enunciados todos exclamativos; la onomatopeya la podemos
considerar una interjección.
Para finalizar el análisis del fragmento, como obra literaria que es, el
autor hace un uso artístico del lenguaje, la función poética, explotando
recursos del propio código lingüístico no habituales ni tan ricos en otros
hablantes. Por ejemplo, utiliza una metonimia en la línea 40 cuando don Latino
dice:¡Me quito el cráneo! Para referirse a la prenda nombra el lugar
donde se lleva: cráneo, que a su vez es una metonimia de cabeza. Otro ejemplo
es la metáfora de la línea 26: Los héroes
clásicos han ido a pasearse en el callejón del Gato, imagen con la que Max
se refiere al tratamiento deformante que sufren los personajes literarios con
su nueva técnica literaria: el Esperpento.
En conclusión, el dinamismo del diálogo teatral, el género literario, la
situación de los personajes y los asuntos desarrollados traen consigo esta gama
tan variada de funciones del lenguaje.
Un poco de publicidad personal...
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